domingo, enero 30, 2011

Xavier Cervantes




En la Civdad de Méjico Distrito Federal, en los EUM, solía yo ir a los Baños Torrenueva, baños de vapor, sita Avenida Álvaro Obregón en la Colonia Roma, allí, como en todo sauna de vapor, uno va a joder, a folgar.

En ese sitio tuve el infortunio de conocer a un ladrón al que penetré yo, tenía buen culo el tío éste, y, con el ardid de que me invitaba a desayunar, abordé su automotor, me mostró un arma de fuego, me llevó a mi casa y me la vació. Este mismo bandido igual hizo con Marcelo, el gran amigo de Ósmar Pérez Ibares marido de Ernesto Miranda quién es sobrino de el cardenal Miguel Dario Miranda y Gomez, hoy finado, quién se halla, sus restos, sus despojos dél, en las catacumbas de la Santa Iglesia Catedral de la Civdad de Santiago de Méjico Distrito Federal, Estados Unidos Méjicanos. A Ósmar también le conocí en esos Baños Torrenueva; allí también conocí al ladrón de Rubén Oliva Macín, quién también me robó una suma de dinero que le presté yo a él. En ese vapor sauna era adónde iba yo a hacer sexo con hombres, por cierto que una vez hallé en ese baño de vapor, a el arrogante compañero del Mercado 20, pescadero de apellido Robles, indio altanero y petulante, en la zona de vapor seco yo hallé a Roblas mamando como becerro una gruesa picha muy erecta de otro hombre, impacté yo e fize un "coitus interruptus" pues el pobre de Robles al verme, intempestivamente de súbito con presteza salió huyendo para irse a meter en el vapor húmedo, lo seguí a allí y, a mi vez, yo le puse mi picha para que a mi vez, me la mamara, no quiso el tozudo de Robles, ¡de lo qué se perdió el bobo Robles!, aterrado el señor Robles se cubrió la cara henchida de vergüenza y salió corriendo para largarse del sitio ése. Salí ufano pues poseer el arcano secreto de otro, es una prez.

No todo fue malo allí en ese sacrosanto sauna, no, ¡guay!, allí tuve la fortuna de conocer al hermoso Xavier Cervantes quién ostenta como segundo apellido el de: Quevedo, excelentísimo amigo Xavier, él sexualmente era activo, con la característica que le fascinaba hacer "rimming", desta manera Xavier Cervantes y de Quevedo me daba mucho placer anal a mí. Xavier Cervantes y de Quevedo después de haber follado por vez primera en esos Baños Torrenueva, me dijo que me invitaba una cerveza, en ese tiempo yo me alcoholizaba, le dije que no pues el peligro de irse con un desconocido hace que uno desconfíe. Le seguí y le di alcance, le dije que sí iba yo con él a la cervecería, cruzamos Avenida Cuauhtémoc y nos embriagamos ambos espitas.

A Xavier Cervantes y de Quevedo le encantaba hablar de Pellicer y de otros poetas como el Xavier Villaurrutia y González Carlos Pellicer, Jorge Mateo Cuesta Porte Petit y el pintor Diego Rivera. A Xavier Cervantes y de Quevedo le encantaba narrarme las intrigas palaciegas de esa pléyade de escritores mezclados en política gubernamental y, sus vidas sexuadas llenas de amantes y en algunos casos, de homosexualidad, eso le encantaba a Xavier Cervantes y de Quevedo narrármelo con pasión.

En una borrachera, el denodado Xavier Cervantes y de Quevedo una vez tuvo el arrojo de invitarme a su casa, esto fue debido a que yo vivía sobre la Avenida Álvaro Obrerón y, Xavier Cervantes y de Quevedo vivía, si mal no recuerdo, sobre la Avenida del Obrero Mundial, ambos, a una calle de la Avenida Cuauhtémoc, Xavier Cervantes y de Quevedo en el lado de Narvarte y yo en el lado de la circunscripción Roma. ¡malhadada idea peregrina! esto lo profiero pues en llegando a su casa, Xavier Cervantes y de Quevedo, muy ufano me mostró su hermoso comedor que le costó mucho dinero, en realidad era hermoso su comedor. Xavier Cervantes y de Quevedo ya borracho quedóse dormidito, allí comenzó el lío para mí pues que en casa de Xavier Cervantes y de Quevedo estaban los hijos de él y la esposa quién dicho sea de paso, quiso organizar grande lío pues no era una persona con salud mental, además de ello la señora esposa de Xavier Cervantes y de Quevedo insistió toda la noche en que yo le confesara que su esposo y yo follábamos. La señora esposa de Xavier Cervantes y de Quevedo, de una amiga suya había recibido la noticia de que Xavier Cervantes y de Quevedo ayuntaba carnalmente con varones. Debido a eso pasé una pésima noche.

Justamente fue este caro amigo Xavier Cervantes y de Quevedo quien tenía la pasión por hacerme el supradicho "rimming", . Xavier solía pasar con sumo cuidado su lengua por mi ano otorgándome así un inefable placer.

Al terminar el sexo, siempre Xavier quedaba dormido y yo le pasaba mi polla por sus labios, a él no le gustaba hacerme felaciones, nunca me hizo ni una pero así y todo, la pasamos de maravilla en las camas de los hoteluchos de españoles, hoteluchos que eran zahúrdas diseminadas en el Centro, que así se llama el barrio sita Delegación Cuauhtémoc en la Civdad de Méjico Distrito Federal.

Lamentablemente Xavier hubo de irse a trabajar, si mal no recuerdo, a Toluca México, por ello ya no nos vimos más pues él pasaba a su casa pocos días por semana.

Xavier Cervantes y de Quevedo era un estupendo amigo, sumamente bonancible, no era seráfico pero sí bonancible. Xavier es un hombre sumamente sensible que gusta de la literatura y de la pintura de Diego Rivera, es un hombre que gusta de la Historia y de la poesía, Xavier es un hombre que viste traje, corbata y sumamente serio, no sé si como gusta del "rimming" ya cogió el VIH-SIDA y ya murió, barrunto que sí pues, a fe mía que haciendo "rimming" se coge fácilmente el VIH-SIDA. Aunado al alcoholismo de Xavier, no creo que siga vivo ese caro amigo mío que tanto placer me otorgó sexualmente en mi mocedad.