lunes, octubre 17, 2011

Falleció el gran periodista y analista político Miguel Ángel Granados Chapa



Hoy lunes 17 de octubre de 2011 aparece en todo el orbe la mala nueva de la muerte de el omnisciente bibliófilo de izquierda, abogado, periodista, escritor, filólogo, académico, historiador, Miguel Ángel Granados Chapa, el magistral periodista, el más grande periodista que ha tenido Méjico.

Hombre éste, Granados Chapa, de letras, hombre de una sin par cultura refinada, hombre inteligente, hombre de música, melómano de un exquisito gusto musical poseedor de una egregia colección de música, amante del concierto de la Orquesta Filarmónica de la UNAM siempre asiduo a sus conciertos; Granados Chapa académico ofreció siempre siempre un léxico rico con una sintaxis de una pureza impoluta, como académico de la Mejicana de la Lengua dominaba como nadie en Méjico el idioma castellano castizo, Granados Chapa siempre tenía como los hombres del Siglo XIX, el término justo, correcto y adecuado para nombrar los hechos y los objetos. Leer y escuchar a este sabio que fue Granados Chapa era entrar en éxtasis, yo extático varios decenios lo escuché en su Plaza Pública de Radio UNAM como religión, lel dominio de la lengua aunado con su esplendente inteligencia, cubiernto de su humanismo y su inefable capacidad para enseñar, todo con un célico nivel de moralidad, hacía que Granados Chapa siempre era disertación magistral, era cátedra cuando Granados Chapa hablaba y cuando escribía pues que lo hacía con esa calidad inefable del sabio abogado decimonónico (decimonónico significa un Quijote, un Quijote es un hombre con honra, con honor, un hombre presto a perder su vida por defender la justicia y la verdad), yo siempre lo escuchaba (y leía) como quién va al templo a escuchar el papa, así yo diario como perro fiel estaba pegado a las bocinas para escuchar su sapiencia y sus justos juicios siempre ponderados y sabios. Por ello hoy me siento solo, contrito, transido de dolor sin su sapiente guía espiritual, moral, lexicológica, ya no cuento más con un arquetipo a seguir que era él, por ello no paro de sufrir su pérdida y lleno de dolor, con asombro y estupor arribo a la hórrida realidad de que el Maestro ha muerto, no me veo sin la matinal « Plaza Pública » a la que sin falta durante decenios paladeé como quién manduca manjares y viandas en una suntuosa mesa de un cardenal o de un duque pues que sus giros lingüísticos, su razonamiento, sus razonamientos, su sintaxis, su lengueje siempre puro, el de un purista, siempre echaba luz dónde había obscuridad y confusión y, dónde los torpes no atienan sino a decir estupideces, en estos tópicos el Maestro era luz inteligente, brillantez intelectual y sapiencia total. Es por ello que hoy lloro como perro a quién a su amo acaba de arrollar un auto y ha muerto.

Nuestro docto Granados Chapa en 2002 recibió el Premio Universidad Nacional, otorgado por la UNAM, en la categoría de Creación Artística y Extensión de la Cultura. Por su lucha constante en pro de la libertad de expresión y la justicia en México la máxima presea mejicana le fue conferida, esto es que recibe en el año de Gracia de 2008 la ínclita Medalla Belisario Domínguez del Senado de la República. Ha menester resaltar la enhiesta defensa que el doctor Granados Chapa hizo con vehemencia y denuedo de el Matrimonio Homosexual dicho Igualitario, y por la adopción de infantes por parte de parejas de mismo sexo en la Ciudad de Méjico Distrito Federal (Estados Unidos Mexicanos), hecho inusitado en un comunicador de un país sumamente cristiano pero no sorprendente viniendo de el mejor periodista, el más humano de entre ellos y de entre las periodistas, nada raro en un gran defensor de la verdad, de la justicia, de la honestidad y de la dignidad de las personas en Méjico. Estas egregias características las explicaba él porque eran las propias de una persona de izquierda.

Ha menester recordar a este sabio que perdimos, una de las mentes más brillantes de Méjico.

Yo seguí como perro fiel a el Maestro a través de toda su carrera en la Radio UNAM, tuve la holgura de escuchar sus cientos de emisiones llenas de sapiencia y de lucidez. Su brillante inteligencia no tenía límites, era sorprendente cuánto sabía ese genio de la lengua, de la Historia, del Derecho, de los libros, de la noticia, de la música, un melómano consumado, me sorprendo a mí mismo cuánto tránsido dolor padezco con su muerte, era mi amigo, mi compañero de todas las mañanas, el sabio que me guía cotidianamente, era mi alma, mi Dios, su programa y sus lecturas eran mi religión, siempre Granados Chapa fue tan puntual, tan ponderado, tan justo, tan sabio que es inefable su conocimiento, su justeza, su sabiduría y su equilibrada ponderación de todo, él fue un hombre de grandísima sapiencia, yo jamás escuché a nadie más que tuviera un conocimiento, y un respeto inefable, de la Lengua como él los tuvo. A más que era un hombre que se ostentaba humilde ante todo dios pues como buen hombre sabio, era humilde, Granados Chapa no tenía necesidad de sentirse superior a nadie pues él fue superior a todos, en libros, en lengua castellana, en Historia, en el conocimiento de los entretelones de la política mejicana él interpretaba los inextricables intersticios que nadie podía entender, él nos los clarificaba con pausas y con la capacidad del sabio que con una inefable capacidad didáctica nos dejaba claro lo que para todo dios era obscuro y difícil de entender. Su sencillez y su humildad ofendían a los brutos políticos presuntuosos y petulantes, Granados Chapa ubicaba a los patanes empresarios chabacanos que, horteras, pretendieron desprestigiarlo, a lo que el genio de Granados Chapa salía a guisa de Galeón Real de Manila, como el Navío de China en aguas asustadizas se movía con imponente parsimonia mientras los mediocres y los zafios mal paridos le combatían con su estulticia a guisa de pequeñas chalupas y canoas tenochcas, de todo trance Granados Chapa salió airoso y gigante como sólo él supo hacerlo con esa grandeza del gentilhombre español.

Nunca podré entender cómo es que sabía tanto, no entiendo a cuál hora escribía pues había leído a todos los autores, al menos a los contemporáneos y coetáneos a él sí los había leído, diario él había leído con profundidad decenas de artículos de cada tema.

Sin él yo quedo inerme, sin guía espiritual pues él no decía las insensateces que dicen los curas, los pastores, los rabinos y los imames, no, Granados Chapa sí guiaba con sabiduría de un hombre grande, él era un estadista de altos vuelos, él tenía la estatura de criticar con juicio severo a los mercachifles panistas, clero católico y demás hijos de puta que pululan por doquiera, ya en el tercer mundo, ya en el primer mundo.

En ese Méjico de iniquidad henchido de malandrines hideputas, el maestro Granados Chapa era probo, digno, honesto, respetuoso de las personas y de la verdad, era como los hombres decimonónicos llenos de probidad y de honra, cosa que los periodistas de aquestos días viven de hinojos antes el poderoso y ante el sicario narcotraficante que conminalos con decapitarlos con presteza si dicen algo digno. Granados Chapa má de una vez fue amenazado para que cambiara el derrotero de su péñola y de su cálamo, jamás lo hizo pues su denuedo fue ingente, inconmensurable, él era lo que se llama un verdadero hombre y no los payasos mediocres usurpadores que se dicen periodistas como los advenedizos arribistas de Univisión, analfabetas ésos de Univisión quiénes no saben ni hablar con propiedad y que más bien hablan como salteadores de caminos (salta a la vista que ésos de Univisión están en esos cargos por tener erectas tetas que gustan a los mugrosos y a los palurdos mequetrefes mercachifles) El maestro Granados Chapa era sapiencia, cultura, elegancia, belleza de lenguaje cuidado que ofendía a los palurdos que hablan como pueden como es el caso de mugrosos como los de Univisión. Había otros que son más bien malandrinos que se presentaban como falsos antagonistas como es el caso del espantable Sergio Sarmiento, fantoche al servicio de los capitales y de los potentados, perodista orgánico que quería contradecir siempre el doctor Granados Chapa, siempre estos hombres de triste memoria, palurdos advenedizos utilitarios como Sergio Sarmiento
se pretendían antagonistas pero eran más bien seres que son pagados para evitar la brillantez de seres magistrales y honestos como Granados Chapa.

A diferencia de los malparidos pseudoperiodistas, el gran maestro Granados Chapa fue enhiesto pues jamás aceptó embute, cohecho, él jamás se vendió, jamás vendió su libertad ni su juicio crítico impoluto e imperecedero. Su sabiduría es inmarcesible como su agudeza que es sin par.

Su grandeza la evidenció siempre. Jamás aceptó halagos ni lisonjas, siempre alejó con presteza a quiénes querían rendirle homenaje. Granados Chapa no era como lo son los mediocres quiénes buscan con ahínco la alabanza y el honor en sarao amén que defendió y ayudó a comenzar a instaurar la democracia en Méjico siempre bajo la luz señera de la verdad y de la libertad, Granados Chapa es el último de los grandes, era el mejor mejicano.

Sigo transido del dolor, sigo taciturno de ya no tener a Granados Chapa entre nosotos, me ha pegao con cojones esa grande pérdida, no veo mi diario acontecer sin su sapiente guía sobre la vida nacional, alguien por allí habló de que quién llenará ese vacío, la respuesta es que nadie pues no existe un genio como Granados Chapa pues esos genios se dan una vez por siglo, él era singular, único, era un faro señero, Granados Chapa era la señera castiza de honra, de clase, de belleza estética y de grandeza de hombre, los que quedan son enanos, son pigmeos.

Pongo mi disco de Joan Manuel Serrat y me pongo a llorar porque el Señor Granados Chapa murió ya, Serrat me recuerda a el Señor Granados Chapa pues hace poco él lo mencionó a la sazón que Serrat y Saura fueron investidos doctores honoris causa por la UNAM.

Hombre sabio, un hidalgo, un Quixote, genio de la política, de la Historia, genio de la Lengua, Granados Chapa fue hombre probo, decente, enhiesto, digno, es inefable la ringlera infinita de lindezas que a guisa de santo nimbado coronaban a este taumaturgo mejicano.

México sin Granados Chapa queda a la merced de los malditos.


Un hombre muere cuando el último que lo recuerda muere.




México.- La Organización de las Naciones Unidas (ONU) lamentó la muerte del periodista mexicano Miguel Ángel Granados Chapa.


En un comunicado, la oficina en México del Alto Comisionado de la ONU expresó su duelo a los familiares que le sobreviven al desaparecido columnista de "Plaza Pública". La misiva hace extensivas las condolencias al gremio periodístico, a su asiduo y extenso círculo de lectores, así como a todas las personas que siempre reconocieron en su actividad pública un espacio de convicción, entereza y compromiso con los derechos humanos,


Naciones Unidas aseguró que el deceso de Granados Chapa 'viste de luto la vida democrática en México', y alentó a todos los que en en ella se encuentran comprometidos (la vida democrática) para levantar desde sus diversas actividades la agenda de Miguel Ángel que propulsó sin descanso para el país.


'Él fue amigo fraterno y generoso de la ONU', acusa el comunicado. "Su partida deja un hondo vacío tanto para la institución como para las personas que laboran y han laborado en esta casa".


La dependencia expresó su más sincero anhelo de que el legado de Miguel Ángel Granados Chapa se vea revitalizado por la generosa entrega y esfuerzo de las mexicanas y los mexicanos que heredan el testimonio de su obra y el magnífico ejemplo de su discreta partida.

Si fuiste testigo de un acontecimiento y quieres denunciar algo o compartir tu punto de vista sobre un tema, entonces envía tu aportación a TÚ REPORTERO y lo publicamos.


La Jornada en línea


México, DF. La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) rendirá un homenaje póstumo al periodista Miguel Ángel Granados Chapa, quien falleció la tarde del domingo a los 70 años de edad.

Así lo anunció en rector de la casa de estudios, José Narro Robles, en una breve entrevista luego de la ceremonia de entrega de los premios Gustavo Baz Prada a jóvenes universitarios que realizaron una extraordinaria labor de servicio social.

“Miguel Ángel Granados Chapa fue un periodista excepcional, un profesional en toda la extensión de la palabra. Se podía estar o no de acuerdo con él, con sus argumentos, sus dichos; pero lo que no se podía uno dar el lujo era de señalar que no actuaba con pleno apego a su conciencia.”


Narro Robles indicó que el autor de la columna Plaza Pública fue también “un defensor de las causas más justas de nuestro país, un hombre que hizo periodismo en todo sentido, desde buscar la nota, la información, hasta procesar la información, el dato, analizarlo, argumentarlo y por supuesto, tomar partido.

“Lo que Miguel Ángel Granados Chapa hizo fue combatir la simulación, combatir permanentemente los problemas, señalarlos, argumentar y defender las mejores causas.”


También lo definió como “un gran profesor de la Universidad, un conductor de uno de nuestros programas más escuchados (en Radio UNAM): La Plaza Pública. Tenía varias expresiones periodísticas y el fue un hombre que efectivamente hizo escuela, que lo hizo en la radio, en el periodismo escrito, en el salón, con la Universidad y en otras instituciones, en la conferencia, en la presentación de libros”.


Para Narro Robles Granados Chapa fue “periodista, maestro y formador de generaciones, por eso la Universidad Nacional rendirá un homenaje y por eso en la Universidad nos duele mucho”.

El rector de la casa de estudios aseveró que para dar fecha a este homenaje, en primer lugar se hablará con la familia del periodista, a fin de tomar una decisión conjunta.




Publicado: 16/10/2011

México, DF. El periodista Miguel Ángel Granados Chapa falleció este domingo 16 de octubre de 2011 a los 70 años.

Nacido en Hidalgo en 1941, y autor de la columna Plaza Pública desde 1977 —que comenzó a publicarse en Cine Mundial— se despidió él mismo de sus lectores el pasado viernes en la edición del diario Reforma.

“Esta es la última vez en que nos encontramos. Con esa convicción digo adiós”, escribió.

Estudió de manera simultánea las carrera de Derecho y Ciencias de la Comunicación en la UNAM, donde fue profesor de periodismo en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, y desde cuya emisora de radio transmitía un noticiero matutino. Posteriormente estudió un doctorado en Historia en la Universidad Iberoamericana.

Ocupó la subdirección editorial de Excélsior, fue fundador y director del semanario Proceso y subdirector del diario La Jornada.

Asimismo, fue jefe de noticieros de Canal Once, director general de Radio Educación y dirigió la revista Mira. En 2008 recibió la medalla Belisario Domínguez del Senado, y en tres ocasiones ganó el Premio Nacional de Periodismo. En 1981 por artículo de fondo, en 2004 en reconocimiento a su trayectoria y en 2006 por su columna Plaza Pública.
Granados Chapa fue autor de varios libros, entre los que sobresalen: La Banca nuestra de cada día (1982), Alfonso Cravioto, un liberal hidalguense (1984), Votar, ¿para qué? manual de elecciones (1985), Comunicación y política (1986), ¡Nava sí, Zapata no!: la hora de San Luis Potosí: crónica de una lucha que triunfó (1992), ¡Escuche Carlos Salinas! (1996), Constancia hidalguense (1999) y Fox & Co. biografía no autorizada (2000).

Se desempeñó entre 1994 y 1996 como consejero ciudadano en el Consejo General del Instituto Federal Electoral. En 1999 compitió bajo las siglas del PRD para la gubernatura de Hidalgo.

Se informó que a petición del periodista, las exequias tendrán carácter íntimo y sólo se espera la presencia de su familia.


El Sol de México

Ciudad de México.- El periodista y escritor, Miguel Ángel Granados Chapa, falleció la tarde del domingo a los 70 años de edad, después de despedirse de sus lectores el pasado viernes en su columna "Plaza Pública".

Granados Chapa falleció víctima de cáncer, enfermedad que padecía desde el 2007, situación que le provocó estragos en su salud, por lo que el 14 de octubre al despedirse de sus lectores escribió: "Esta es la última vez en que nos encontramos. Con esa convicción digo adiós."

Fuentes cercanas al periodista confirmaron a El Sol de México que falleció aproximadamente a las 17:30 horas y que sus restos serán velados en su natal Hidalgo y en compañía de sus familiares y amigos cercanos.

"No habrá acto público, la voluntad de Miguel Ángel fue que sólo fuera en privado y con sus familiares cercanos", comentaron.

El periodista era colaborador del periódico "Reforma", así como de la revista "Proceso", además de conducir el programa "Plaza Pública" en Radio UNAM.

Asimismo, colaboró en diversos programas de radio y televisión, además de ser partícipe en la fundación de varios diarios y revistas de circulación nacional.

Oriundo del estado de Hidalgo, Miguel Ángel Granados Chapa se distinguió por realizar un periodismo crítico, además de realizar diversos análisis de la situación política de nuestro país.

Estudió las carreras de derecho y periodismo en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y en 1967, Granados Chapa colaboró en el periódico "Excélsior", fue director del Canal 11 del Instituto Politécnico Nacional (IPN), así como de Radio Educación; fundo la revista "Proceso", trabajó para "Reforma" y era el conductor de la "Plaza Pública" en Radio UNAM.

En el 2008 recibió la Medalla Belisario Domínguez, además de ser elegido como integrante de la Academia Mexicana de la Lengua y recibir en tres ocasiones el Premio Nacional de Periodismo.

El pasado viernes en su última columna "Plaza Pública", titulada "De Coalición a Coalición", Miguel Ángel Granados Chapa cerró un círculo que comenzó en 1977, desde la primera aparición de la publicación.

El Maestro Granados Chapa es autor de los libros: "La Banca nuestra de cada día"; "Alfonso Cravioto, un liberal hidalguense"; "Votar, ¿para qué? manual de elecciones"; "Comunicación y política"; "¡Nava sí, Zapata no!, la hora de San Luis Potosí: crónica de una lucha que triunfó"; "Fox & Co., biografía no autorizada", entre otros títulos.

Por último, el periodista se desempeñó como consejero ciudadano en el Instituto Federal Electoral entre 1994 y 1996, además de ser el candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en 1999 a la gubernatura de Hidalgo.




Dos días después de haberse despedido de sus lectores, el periodista Miguel Ángel Granados Chapa falleció este domingo 16 de octubre de 2011.

Alrededor de las 17:45 horas, el autor de la columna 'Plaza Pública' murió en la Ciudad de México, a la edad de 70 años de edad.

El periodista dejó instrucciones para que sus exequias se llevaran a cabo de manera íntima, en presencia únicamente de sus familiares.

El pasado viernes 14 de octubre de 2011, Granados Chapa anunció el fin de 'Plaza Pública', columna que escribió a lo largo 34 años en distintos periódicos nacionales, los últimos 18 años fue en las páginas de Grupo Reforma.

'Ésta es la última vez en que nos encontramos.

Con esa convicción digo adiós', escribió.

Granados Chapa nació en Mineral del Monte, Hidalgo, el 10 de marzo de 1941.

En 1960 migró a la Ciudad de México para cursar de forma simultánea las carreras de Derecho y Periodismo en la Universidad Nacional Autónoma de México.

Su ejercicio periodístico comenzó en 1964, en el semanario Crucero, y no paró durante los 47 años siguientes.

Dotado del 'don de la memoria de la información', como declaró en una entrevista en 2008, Granados Chapa se definió como un periodista premoderno alejado de las tecnologías de internet.

En su carrera recibió múltiples premios y reconocimientos.

Tres ocasiones fue el digno recipiendario de el Premio Nacional de Periodismo; en 1981, por artículo de fondo; en 2004 por trayectoria periodística; y 2006 por su columna « Plaza Pública ».

En 2008, el Senado de la República le otorgó el Belisario Domínguez y un año después la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano Cemex-FNPI le rindió un homenaje.

La Universidad Autónoma Metropolitana le otorgó en 2009 el Doctorado Honoris Causa por su trayectoria académica y periodística.

El pasado viernes 14, la Escuela de Periodismo Carlos Septién García le concedió el Premio Nacional de Periodismo, y anunció que la ceremonia de condecoración se realizaría el jueves próximo.

Miguel Ángel Granados Chapa formó parte del equipo que salió de Excelsior en 1976 para fundar el semanario Proceso.

Dirigió el Canal Once de televisión en 1977.

Un año después se hizo cargo de la dirección de Radio Educación.

Y en 1988 fungió como subdirector del periódico La Jornada.

Defensor de la democracia y la participación ciudadana, Granados Chapa se desempeñó como consejero ciudadano del Instituto Federal Electoral de 1994 a 1996 y en 1999 compitió por la Gubernatura de Hidalgo en una coalición encabezada por el PRD.

En 2007, al cumplirse los primeros 30 años de la columna 'Plaza Pública', Granados Chapa comentó acerca de las felicitaciones que le habían hecho llegar los lectores: En su despedida, Granados Chapa fue optimista sobre el futuro de México: 'Es deseable que el espíritu impulse a la música y otras artes y ciencias y otras formas de hacer que renazca la vida, permitan a nuestro País escapar de la pudrición que no es destino inexorable.

Sé que es un deseo pueril, ingenuo, pero en él creo, pues he visto que esa mutación se concrete'.






El periodista Miguel Ángel Granados Chapa falleció este domingo 16 de octubre de 2011 a la edad de 70 años, en la ciudad de México, confirmó el Grupo Reforma, donde colaboró hasta sus últimos días.
El escritor y ganador en varias ocasiones del Premio Nacional de Periodismo y de la medalla Belisario Domínguez del Senado se despidió de sus lectores el viernes pasado, en su columna Plaza Pública que se publicó en el diario Reforma.
Algunos de los textos de Granados Chapa fueron parte de las páginas editoriales de El Diario NTR, que se edita en Zacatecas capital, y en otros medios de todo el país.
Durante varios años el escritor y periodista enfrentó con mucho valor una enfermedad terminal y prácticamente no dejó de ejercer su oficio, el oficio de las palabras.


El columnista se retiró del periodismo el viernes; murió a los 70 años de edad

Miguel Ángel Granados Chapa, periodista y colaborador del diario Reforma y Proceso, falleció esta tarde a los 70 años de edad.

También fue conductor en Radio UNAM, con su Plaza Pública.

Apenas este viernes anunció su retiro de las actividades periodísticas.

Símbolo del oficio y ejemplo de trabajo ético, Granados Chapa participó activamente en diversas publicaciones, entre ellas, los diarios La Jornada y Reforma y en la revista Proceso. En todas ellas plasmó sus ideas bajo el impecable trazo de la crítica.

Por su papel en la vida social y académica, y por la defensa de la libertad de expresión, recibió en 2008 a la Medalla Belisario Domínguez.

En ese mismo año fue elegido miembro de la Academia Mexicana de la Lengua.

En su última columna Plaza Pública del diario Reforma, que el maestro Granados Chapa tituló "De coalición a coalición", aprovechó para despedirse de sus lectores y cerrar uno de los ciclos más fructíferos de su vida. "Esta es la última vez en que nos encontramos. Con esa convicción digo adiós".

Su columna Plaza Pública apareció desde 1977 y se publica en Reforma desde su fundación, el 20 de noviembre de 1993.

Miguel Ángel Granados Chapa siempre dio un espacio especial a la Universidad Nacional Autónoma de México, donde cursó las carreras de derecho y de periodismo, aunque también realizó estudios de doctorado en historia en la Universidad Iberoamericana

En su carrera vivió distintas responsabilidades, entre éstas, la de subdirector editorial de Excélsior en 1976; director de la revista Proceso, de 1976 a 1977; jefe de los noticieros del canal 11, también 1977; director de Radio Educación, entre 1978 y 1979; director de La Jornada, entre 1988 y 1990, y director de la revista Mira, de 1990 a 1994. También participó con Manuel Becerra Acosta en el proyecto del Unomásuno.

Miguel Ángel Granados Chapa recibió en tres ocasiones el Premio Nacional de Periodismo.



Su última columna de "Plaza Pública"

De coalición a coalición

Es preciso eliminar la confusión posible entre una coalición electoral, figura jurídica ya existente en nuestro derecho, y la propuesta en curso de integrar gobiernos de coalición. Ambas, por supuesto, demandan la integración de voluntades partidarias. Pero su propósito es diferente...



MEXICO CITY — Mexico’s president is mourning the death of well-known columnist and democracy advocate Miguel Angel Granados Chapa, calling his passing a sad say for letters and journalism in Mexico.

President Felipe Calderon says Granados Chapa was a vigorous defender of freedom of expression and tireless journalist whose critiques strengthened democratic culture and life.

Calderon issued his condolences in a statement late Sunday.

The newspaper Reforma, where Granados Chapa wrote the column, Public Square, said he died Sunday afternoon at the age of 70.

He was a key player in Mexico’s march toward democracy, a founder of the investigative magazine Proceso and three-time winner of the country’s National Journalism Award.




 La ONU lamenta muerte del periodista Miguel Ángel Granados


México.- La Organización de las Naciones Unidas (ONU) lamentó la muerte del periodista mejicano Miguel Ángel Granados Chapa.

En un comunicado, la oficina en México del Alto Comisionado de la ONU expresó su duelo a los familiares que le sobreviven al desaparecido columnista de "Plaza Pública". La misiva hace extensivas las condolencias al gremio periodístico, a su asiduo y extenso círculo de lectores, así como a todas las personas que siempre reconocieron en su actividad pública un espacio de convicción, entereza y compromiso con los derechos humanos,


La Organización de las Naciones Unidas (ONU) aseguró que el deceso de Granados Chapa 'viste de luto la vida democrática en México', y alentó a todos los que en en ella se encuentran comprometidos (la vida democrática) para levantar desde sus diversas actividades la agenda de Miguel Ángel que propulsó sin descanso para el país.


'Él fue amigo fraterno y generoso de la ONU', acusa el comunicado. "Su partida deja un hondo vacío tanto para la institución como para las personas que laboran y han laborado en esta casa".


La dependencia expresó su más sincero anhelo de que el legado de Miguel Ángel Granados Chapa se vea revitalizado por la generosa entrega y esfuerzo de las mexicanas y los mexicanos que heredan el testimonio de su obra y el magnífico ejemplo de su discreta partida.


El Honorable Congreso del estado de Hidalgo proyecta otorgar, « post mórtem » la medalla Miguel Hidalgo al periodista hidalguense Miguel Ángel Granados Chapa.

Se prevé que los diputados hidalguenses suban un punto de acuerdo en la sesión de este martes o jueves para acordar el tema.

Miguel Ángel Granados Chapa, periodista y colaborador del diario Reforma y Proceso, falleció a los 70 años de edad. También fue conductor en Radio UNAM, con su Plaza Pública.

Apenas el viernes 14 de octubre anunció su retiro de las actividades periodísticas. Ese día, de manera sencilla en el último párrafo de su columna "Plaza Pública" en el diario Reforma, que tituló "De coalición a coalición", escribió: "Esta es la última vez en que nos encontramos. Con esa convicción digo adiós".



Anuncia la UNAM la Cátedra “Miguel Ángel Granados Chapa”

A partir de enero de 2012, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) instituirá la Cátedra “Miguel Ángel Granados Chapa” y una beca para jóvenes estudiantes, como un tributo al destacado periodista, anunció anoche el rector de la máxima casa de estudios del país, José Narro Robles.

Durante un homenaje póstumo al columnista en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, los periodistas Carmen Aristegui y Vicente Leñero, el diputado Javier Corral, el arquitecto Fernando González Gortázar y Raúl Padilla, presidente de la FIL, destacaron la vida y obra de quien calificaron un “defensor de la libertad de expresión”.

En el Auditorio Juan Rulfo de la Expo Guadalajara, donde se lleva a cabo la feria que termina mañana, Narro Robles destacó la formación profesional y la labor como académico de Granados Chapa (1941-2011) como un paradigma de lo que llegan a ser los egresados de las universidades públicas en México.

En el marco del VII Encuentro Internacional de Periodistas, subrayó que para la institución que encabeza, Granados Chapa representa un modelo de congruencia, un compromiso con la justicia, con la democracia, con la libertad de pensamiento y de expresión.

“Él fue un defensor a ultranza de la autonomía de las personas para exponer lo que se cree y para defender los dichos; para debatir con razones y escuchar con tolerancia”, afirmó.

Aseguró que al rendir homenaje al autor de la columna “Plaza pública” y de otras más como “La calle” y “Diario de un espectador”, se recuerda a un auténtico historiador de lo cotidiano, a un analista estricto de la realidad del país y a un minero de la conciencia nacional.

Ante una sala abarrotada, comentó que la única manera de reemplazar al periodista será con la participación de todos, y estimó que su ausencia pesará todos los días.

En su turno, Vicente Leñero recordó con cariño a su amigo y “hermano”, y refirió que “Miguel Ángel no necesitaba metáforas ni epítetos. Su prosa era directa, iba a lo que iba y sin arrebatos; siempre se fue por la misma línea recta que lo definió”.

El escritor y periodista rememoró su amistad con el homenajeado durante la década de 1970, cuando ambos trabajaron en el diario “Excélsior”.

A su vez, Carmen Aristegui aseguró que Granados Chapa es una de las figuras sin la cual “no se entendería la fundación y la existencia de las medios de comunicación más relevantes de México.

“Miguel Ángel se constituyó en un pilar del ejercicio libre en el periodismo nacional; decir Granados Chapa es decir congruencia, integridad, vocación de servicio a la sociedad mexicana”, dijo.

Destacó que el galardonado con la Medalla “Belisario Domínguez” por su lucha constante en favor de la libertad de expresión y la justicia, en 2008, dejó bien establecido su trabajo dentro de los parámetros del periodismo.

Por su parte, Raúl Padilla calificó a Granados Chapa como uno de los columnistas más valientes, lúcidos y críticos en la historia del periodismo mexicano, así como un paladín de la libertad de expresión.

“Fue un hombre íntegro que anheló ver a los mexicanos en mejores condiciones de vida, su labor fue un arma contra la desigualdad y la impunidad, que continúan flagelando en el país.

“Su vida es ejemplo de trabajo y esperanza, de logros y satisfacciones; fue un gran periodista que por su objetividad, compromiso y calidad obtuvo el Premio Nacional de Periodismo”, recordó.

Agregó que Granados Chapa deja un legado enorme para sus colegas y nuevos periodistas, que en su labor encuentran una fuente de inspiración para no dejarse acobardar por las amenazas.

También el diputado Javier Corral destacó la trayectoria periodística del homenajeado y recordó algunos de los asuntos más destacados para el país que dio a conocer y analizó, en algunos casos incluso con el linchamiento por parte de otros medios de comunicación, anotó.




Yo ya me voy
al puerto donde se halla
la Barca de Oro
que debe conducirme
yo ya me voy;
Sólo vengo a despedirme,
adiós, mujer, adiós
para siempre adiós.


No volverán
tus ojos a mirarme,
ni tus oídos
escucharán mi canto
voy a aumentar
los mares con mi llanto,
adiós, mujer, adiós
para siempre adiós

No volverán
tus ojos a mirarme,
ni tus oídos
escucharán mi canto
voy a aumentar
los mares con mi llanto,
adiós, mujer, adiós
para siempre adiós






Algo se muere en el alma cuando un amigo se va
cuando un amigo se va algo se muere en el alma
cuando un amigo se va algo se muere en el alma
cuando un amigo se va.

Cuando un amigo se va y va dejando una huella
que no se puede borrar
y va dejando una huella que no se puede borrar.

No te vayas todavía no te vayas por favor
no te vayas todavía que hasta la guitarra mía llora
cuando dice adiós.

Un pañuelo de silencio a la hora de partir
a la hora de partir un pañuelo de silencio
a la hora de partir un pañuelo de silencio a la hora de partir.
a la hora de partir porque hay palabra que hieren y no se deben decir

Porque hay palabra que hieren y no se deben decir.

No te vayas todavía no te vaya por favor
no te vayas todavía que hasta la guitarra mía llora
cuando dice adiós.

El barco se hace pequeño cuando se aleja en el mar.
cuando se aleja en el mar
el barco se hace pequeño cuando se aleja en el mar.
el barco se hace pequeño cuando se aleja en el mar.
cuando se aleja en el mar y cuando se va perdiendo
que grande es la soledad.

y cuando se va perdiendo que grande es la soledad.

No te vayas todavía no te vaya por favor
no te vayas todavía que hasta la guitarra mía llora
cuando dice adiós.

Ese vació que deja el amigo que deja el amigo que se va
el amigo que se va
ese vació que deja el amigo que deja el amigo que se va
ese vació que deja el amigo que deja el amigo que se va
el amigo que se va es como un pozo sin fondo que no se vuelve a llenar
es como un pozo sin fondo que no se llega a llenar

No te vayas todavía no te vaya por favor
no te vayas todavía que hasta la guitarra mía llora
cuando dice adiós. (sevillana)